domingo, 27 de diciembre de 2009

Despertador...


Me levanto cada día, sin preguntarme qué tengo que hacer, como una maquina cuyo encendido automático le obliga a iniciar su marcha, sé que tengo que hacer, hacía donde dirigirme, que cosas coger, si tengo suerte para cuando me subo a mi vehículo estoy despierto, el sacar el coche de una cochera que no es eléctrica me incomoda cada día, pero ante la realidad de que solo eso existe lo ignoro y continuo, prendo la radio, la misma programación, los mismos locutores, rara vez cambio la estación, el camino me lleva a mi destino, no sin antes soltar unas carcajadas por las ocurrencias de mis compañeros de viaje, primera señal de que alguien vive dentro de mí, el innovar en rutas me estresa, me hace pensar en el trafico que me puedo encontrar, si es que abra algo que me retrase. Casi siempre llego con 15 minutos de antelación rara vez a platicar, sigo en un estado de aparato cuyo funcionamiento es automático, saludo a los pocos que existen para ese momento, ya en mi lugar prendo mi computadora,- ¿tengo tarea? mmm no, la hice ayer-, creo que tengo que ir a imprimir ciertos documentos pero no ahora todavía no abren, revisare los periódicos, me digo. Después de ver noticias muy similares a las de ayer me deprimo al ver que la economía no está en sus mejores momentos, ¡qué horror!… ¿esto me podría afectar a corto plazo? Mi gran preocupación es que mi padre liquide sus deudas de taza variable para evitar futuros movimientos abruptos que nos endeudarían de una manera que prefiero no imaginar, en estos momento creo que ya alguien dentro de mi puede dar señales de vida a alguien de este mundo. Hora por hora, trato de entender y escuchar las pocas cátedras que tengo oportunidad de tener, aun cuando existen maestros que no dicen nada que me resulte interesante trato de escuchar, Cierto profesor nos habla de un tema, ¿pero? ¿realmente a él le interesa decirnos eso? ¿Es que un día anterior pensó que vendría a hacer este sujeto cuando se entero que nos tendría que hablar de este tema?, de los demás no tengo quejas, me resulta interesante escucharlos, si no aprendo de su materia aprendo de ellos, a veces trato de imaginarme sus vidas, y me compadezco de aquellos que están aquí por frustraciones profesionales y motivaciones económicas, yo creo que unos de los placeres del hombre debe de ser enseñar lo poco que tendrá oportunidad de aprender en este mundo, entonces, aquellos que vienen para cumplir la obligación de aguantar a unos hijos de papi por un salario bajo, no deben de ser muy felices, en cambio aquellos que vienen a compartir su humilde conocimiento con sus futuros colegas, deben disfrutar las cosas en común que tienen con esos individuos que buenos o malos son humanos. Realmente me considero un ser alegre, pero el trance que vivo durante una hora en lo que puedo revivir después de una corta jornada de sueño me deprime un poco…me gustaría poder iniciar de una manera efusiva, el decir ¡hoy es un gran día! qué gran aventura estoy a punto de vivir suena algo seductor, sin embargo no creo que sea parte de mi vida, aprendo a vivir con ello y lo acepto, ya que en lo que resta del día saco provecho a la alegría de la gente que me rodea.

-Y al final del día solo programo de nuevo mi despertador.


2 comentarios:

Unknown dijo...

valla! sí que debe ser frustante despertar sin un motivo, una ideología que te anime a seguir con alegría tu día a día, haz intentado salir de la rutina?, comer algo nuevo? tan sólo ponerte el relos en la muñeca contraria a la que acostumbras cambia por completo tu vision de las cosas, empezar por cosas pequeñas te abre poco a poco el panorama de las grandiosas cosas que pasas por alto, solo modifica tu comportamiento, haz algo distinto y placentero todos los días, juega ping pong, avienta una pelota a la pared!!! lo que sea! solo cambia tu rutina!... que no es nada productivo vivir en automático, por una vez en tu vida, desprendete del sespertador!

Unknown dijo...

despierta a la maavillosa aventura que es la vida mi chavo!